Hoy llueve pero no importa… En su día a día Teodoro González, “Teo” que es como le conoce el mundo taurino, mayoral de la ganadería de Alcurrucén, se cala el sombrero y se coloca los botos, a veces incluso antes de que amanezca y el gallo despierte a la mañana.
Luego se reúne con su equipo, es imprescindible tener un buen equipo en el campo, que capitanea su hijo “Teíto” que con gorra visera ya aprende las mañas de un buen mayoral: afición e ilusión. Tras las novedades recorre los cercados, asiste a cada rincón que conoce como la palma de su mano y como si de un médico se tratara, los examina y ausculta para comprobar que los bravos no tienen cornadas que son muy amigos en las noches revueltas de andar en líos.
Es uno de sus muchos quehaceres en su día a día, días por cierto que a veces duran más de veinticuatro horas, porque Teo comienza temprano y lo hace poniendo en marcha la maquinaria de su cuerpo que hay que estar al cien por cien para andar en esta profesión, tras marcarse unas carreras que lo mantienen en forma de lo que dan fe las innumerables ocasiones en las que ha de jugarse el tipo en el cercado, toca supervisar la alacena y el cuarto donde se templan los aperos.
Cuántos pensamientos y cuántos tesoros se guardan entre esas cuatro paredes.
Es la celestial música del campo el contorneo de los cencerros pues gracias a ellos se puede saber dónde está el ganado. Hoy llueve pero a Teo como a la mayoría de los mayorales no le importa, las faenas se ejecutan tanto si templa el sol como si nieva. Hoy llueve y Teo se acerca al prado donde descansan los bueyes. Los bueyes son claves para el manejo del bravo, tanto es así que no sólo ayudan en las faenas sino que además pueden salvarte la vida; por eso Teo los trata con mimo. Es una parada espléndida de capirotes, la raza berrenda es la más utilizada para estos menesteres, al que se ha sumado un animal de finas hechuras cruce de berrendo con martelengo y en el que Teo tiene puestas muchas esperanzas. Es un estudioso Teo de los bueyes hasta el punto de tener tanta ilusión que anda con ganas de probar con la raza Blanca Cacereña, paisana del propio Teo porque para ser mayoral no se mira la distancia del hogar sino que se hace hogar donde habita el bravo que en definitiva es su vida. Sigue lloviendo pero a Teo no le importa y pasea su magnífica parada por las mangas y los chiqueros para que los berrendos no se olviden de los caminos a tomar cuando toque en suerte que luego vienen las prisas y los nervios en días de verano por eso hay que aprovechar estos días templados de lluvia.
En el día a día y robándole una pizca de tiempo al tiempo, Teo acaricia a uno de los gigantes que tiene amansado hasta el extremo de que todos nos fotografiamos con él. “Lo de los bueyes es un arte” dice y no le falta razón, porque el buey tiene que trabajar y además tener brillo y lucir. No son pocas las ocasiones en las que en mitad del cerrado los toros se arremolinan o se ponen nerviosos y no paran y es precisamente esa “doma”, ese sosiego que luce una parada bien domada quien ayuda a tranquilizar a los nerviosos toros.
En el campo todo el mundo tiene una obligación, así es como funciona un buen equipo. Aquí en el Cortijillo y a pesar de la lluvia se repasan todos los animales mañana y tarde. Es el día a día de un mayoral, tarea que se hace con la mayor de las ilusiones porque para andar con esto hay que tener, sobre todo, mucha afición no en vano la entrega es total, cediendo a la profesión la propia vida.
Hoy llueve pero no importa, a los mayorales como a Teo les sonríe el rostro cuando llueve porque el agua siempre es bienvenida en los campos de bravo, un día como otro cualquiera en el que al compás de la esperanza y el buen ánimo Teo pasea por los campos preñados de afición y de sabiduría, pero sobre todo de vida.
Precioso el reportaje , enhorabuena a todos los que han participado y un abrazo fuerte para Teo , un señor
Enhorabuena para todo el equipo, muy buen trabajo
Bonito reportaje, preciosas fotos, sería bonito que muchas personas conocieran este mundo seguro que verían las cosas de otra manera, valorando el trabajo , que todo esto lleva a su alrededor, enhorabuena a todo el equipo.